Muchas empresas necesitan urgentemente saber cómo archivar documentos, y así aumentar la productividad y eficiencia de sus procesos de trabajo.
La búsqueda de documentos es uno de los mayores detractores del tiempo en la oficina.
Los archivos deben ser organizados de manera numérica o alfabética.
De esta forma se establece en la oficina o empresa un sistema de archivo para implementar en el futuro.
Cada carpeta debe ser rotulada con la información que nos permita identificar su contenido.
Por ejemplo, el nombre del cliente, caso o número de expediente.
Esto agiliza la búsqueda de documentos de manera eficaz.
Pueden utilizarse carpetas de colores, o bien etiquetas de color.
Esto nos permitirá en todo momento identificar a simple vista una categoría de expediente.
Los archivadores deben ser enumerados, así como cada una de sus gavetas.
Por ejemplo, podemos tener cuatro archivos enumerados del 1 al 4, por lo que sus gavetas serían la 1.1, 1.2, 2.1, 2.2, etc.
Debemos llevar un inventario completo del contenido de cada archivo en una hoja electrónica.