1. La luz natural: tu mejor aliada
Si tienes la suerte de contar con una ventana en tu oficina en casa, ¡aprovéchala!
La luz natural no solo es agradable, sino que también mejora el estado de ánimo y reduce la fatiga visual.
Pero ojo, también tiene sus trucos:
Coloca tu escritorio cerca de la ventana: La luz debe venir de un lado, no directamente frente a ti para evitar reflejos en la pantalla.
Controla la intensidad: Usa cortinas ligeras o estores para filtrar la luz en los días más soleados.
Si la luz natural no es suficiente, no te preocupes.
Vamos con las opciones artificiales que te harán brillar.
2. Lámparas de escritorio: El foco de atención
La estrella de cualquier home office es una buena lámpara de escritorio.
No vale cualquiera; necesita ser funcional y estética.
¿Qué debes buscar?
Luz ajustable: Una lámpara con brazo articulado te permite dirigir la luz justo donde la necesitas como pasa con la lámpara Mae de foco lector.
Temperatura de luz adecuada: Opta por una luz neutra (4000K-5000K) que imite la luz del día y mantenga tus ojos despiertos y enfocados.
Diseño ergonómico: Una base estable y un cabezal ajustable son imprescindibles.
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¡Hay una perfecta para ti!
Lámpara de mesa Mae
3. Iluminación ambiental: No trabajes en una cueva
Una luz de escritorio es crucial, pero no puede hacerlo todo.
Necesitas también una iluminación general que evite contrastes bruscos y haga tu espacio más acogedor.
Lámparas de techo LED: Dan luz uniforme a toda la habitación.
Opta por un diseño moderno que complemente tu decoración.
Lámparas de pie: Ideales para esquinas oscuras o para aportar un toque de estilo.
Reguladores de intensidad: Cambia el ambiente según la hora del día o tu estado de ánimo.
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4. Luz decorativa: Porque el estilo también importa
No subestimes el poder de las luces decorativas.
Estas piezas no solo iluminan, sino que también personalizan tu espacio y lo hacen más inspirador.
Cintas LED: Perfectas para colocar detras del monitor o en estanterías.
Dan un toque moderno y ayudan a reducir la fatiga visual.
Lámparas de diseño: Una pieza única puede ser el elemento que complete tu oficina.
Apliques de pared: Aportan luz suave y estilo sin ocupar espacio en el escritorio.
Explora nuestra colección de lámparas de diseño aquí y dale personalidad a tu home office.
5. Consejos extra para optimizar tu iluminación
Evita reflejos: Coloca las luces de manera que no se reflejen en la pantalla del ordenador.
Usa bombillas LED: Son energéticamente eficientes, duraderas y vienen en una variedad de temperaturas de luz.
Experimenta con capas de luz: Combina luz general, puntual y decorativa para crear un espacio equilibrado.
Tu home office no tiene por qué ser un rincón aburrido.
Con la iluminación adecuada, puedes transformar tu espacio en un lugar donde las ideas fluyen y el trabajo se siente menos pesado.