Pisos cerámicos están entre las opciones más usadas por sus múltiples ventajas.
Se mantiene fácil y tiene una limpieza bastante simple y es resistente a los cambios de temperatura.
Madera natural es una solución estética y confortable.
Tiene muchas ventajas, pero hay que saber también sus contras.
Si bien la madera es resistente, es un poco más delicada que otros materiales, lo que hace que necesite un mantenimiento anual, con productos que la protejan del sol y la humedad.
También, se puede optar por alguna madera sintética que está realizada con polímeros plásticos y no necesita mantenimiento.
Es resistente al sol y al calor, no se deforma ni se astilla y es antideslizante.
Piedra natural son decorativos, cálidos al tacto y muy resistentes a las inclemencias del tiempo y al tránsito.
Por esto, los diseñadores los aconsejan mucho a sus clientes para balcones, terrazas y patios.
Hormigón o cemento alisado es una gran opción, no es nada cara y se puso muy de moda.
El hormigón pulido es fácil de instalar y al tratarse de un material resistente a todo tipo de grasas y detergentes, se limpia sin ningún problema y en forma muy económica.
Adoquines soportan muy bien las manchas y la exposición al sol.
Pero además se le puede hacer distintos tratamientos a la hora de instalarlos para que tengan un acabado más mate o más brillante.
Laja es la opción más económica.
Hay varios colores, las más llamativas suelen ser las de tonos azules y grises, con distintos cortes que se van combinando cuando se aplican al piso.
Venecitas está realizado con pequeñas piezas de material vítreo o cerámico, y vienen en distintos tamaños.
La colocación debe ser reservada a un especialista, quien deberá tener especial cuidado con la toma de juntas.
Hay artistas plásticos muy famosos que hacen grandes obras en casas y residencias.
No es la opción más económica, pero queda muy bella.